Islandia podría convertirse en la primera nación dirigida por ‘piratas’.
No, no hablamos del pirata cojo con pata de palo, con parche en el ojo, y cara de malo de Sabina; nos referimos a los miembros del Partido Pirata, cuya bandera no es una calavera, sino (en sus propias palabras) la consigna de erradicar la corrupción y transformar la sociedad a través de la democracia directa.
En su mayoría jóvenes, los Piratas han visto su movimiento crecer a partir de una pequeña agrupación sueca que combatía las restrictivas leyes de los derechos de autor en el 2006 hasta convertirse en una fuerza política a tomar muy en cuenta en distintos países del mundo.
Mientras que el Partido Pirata de Suecia y otros alrededor de Europa han luchado cuesta arriba por obtener cuotas de poder, el Partido Pirata de Islandia ha alcanzado este año un 20,5% de la intención de voto en el presente proceso electoral, colocándolo apenas por debajo del tradicional Partido de la Independencia (25,1%).
Las elecciones se llevarán a cabo este sábado 29 de octubre, por lo que mañana conoceremos el desenlace de este proceso.
“Han escuchado eso de que alguna gente ve el árbol y otros el bosque?”, decía el Sup Marcos, “pues a nosotros, nosotras, zapatistas, nos gusta ver la raíz.”
Por cierto, la de la imagen es la Gata-Perro.