El cine nos convoca, una vez más.
Domingo 11 de diciembre, día 4 del Costa Rica Festival Internacional de Cine, evento que se ha venido consolidando los últimos tres años, con una propuesta sobresaliente con títulos que de otra manera es -casi- imposible que lleguen a las pantallas de los cines comerciales de nuestro país, para hoy dejó un par de recomendaciones al respecto.
Pero antes, un par de sugerencias a quienes no han asistido al evento y desean hacerlo: primero, que lleguen temprano, para esta edición la “hora tica” no existe, afortunadamente las tandas están iniciando a la hora señalada evitando atrasos innecesarios, un punto más a favor de los organizadores. Segundo, para las tandas nocturnas, compren los tiquetes con antelación porque son las horas que más publico traen.
Ahora sí, recomendaciones: Hoy a las 9:00 de la noche en el Cine Magaly se estará presentando la primera tanda (de dos) del nuevo film del ya casi octogenario Paul Verhoeven, es su retorno a la pantalla grande, una obra donde logra revitalizarse y salir avante por la riqueza de su contenido.
Basada en una novela titulada Oh… (2012) del escritor francés Philippe Djian cuenta con un guion de David Birke. Presenta a Michèle (Isabelle Hupert), protagonista marcada por un evento en su niñez, ahora convertida en una exitosa mujer líder de una empresa de videojuegos. Una tarde es violada en su propia casa, más que acudir a la policía opta por callar, hacerse con algunos implementos de protección personal y seguir su vida.
El largometraje estrenado en el Festival de Cannes logra ir construyendo de forma sumamente efectiva sus bases, en dos sentidos primordiales, el primero es la atmósfera, la credibilidad de la narración y el temor de la protagonista ante su situación son perfectamente retratados, lo que hace que dicho sentimiento traspase la pantalla y se sumerja en el espectador.
Lo segundo es en la construcción de los personajes secundarios, uno de los principales problemas en las adaptaciones de novelas a películas es que las primeras tienen una posibilidad más amplia de presentar personajes y desarrollarlos. En Elle la agilidad del guionista permite presentar unos 10 personajes secundarios con una gran importancia, es decir, no están como simple relleno, y en ningún momento atoran la fluidez de la trama.
La protagonista reciente un estado de confusión que es muy fuerte, no solo por el hecho de ser violada y de seguir siendo acosada por esa persona, sino por otros motivos ajenos a eso, teniendo problemas: como madre, como hija y en el trabajo. Además de una gran frustración sexual: por su edad, por su amante (vacuo completamente), por la atracción sobre su vecino y por la nueva -y joven- pareja de su ex.
No vale la pena ahondar en detalles ante una obra de tanta riqueza argumental, al menos no en una crítica como esta que lo que pretende es generar el interés en el espectador. Ya habrá más oportunidades para meterse de lleno en su argumento, porque Elle da para hablar sobre muchos temas alrededor de su propuesta y los múltiples matices en su interior, aún más si se piensa en el juego macabro que de su protagonista emerge.
Simplemente imperdible, además de hoy domingo, la repiten el sábado 17 a las 9:10 p.m. de la noche en el Teatro de la Aduana.
Un largometraje que cumple su segunda tanda es The Eyes of My Mother, vale decir que es un relato de terror ambientado en una alejada y solitaria zona boscosa, se centra en Francisca (Kika Magalhaes), una joven que tras un evento traumático en su niñez pierde el equilibrio emocional y se convierte en una terrible psicópata. La soledad se funde con dicho desequilibrio para entorpecer el bienestar mental de la protagonista, quien únicamente busca compañía y amor.
El film se divide en tres episodios: “Madre”, “Padre” y “Familia”, los cuáles se desarrollan precisamente pensando en su interacción con esos personajes y en el forjamiento de su familia. El guion fue escrito por el propio director, Nicolas Pesce, siendo este su primer largometraje de ficción, él escribió en todo momento su historia pensando en tener a Magalhaes como su protagonista, quien el papel le sienta a la perfección consiguiendo un trabajo sobresaliente.
Francisca es un personaje que tiene un actuar tranquilo, una mirada fría e intenciones “buenas”, viéndolo desde el punto de vista de lo que ella quiere, el problema es cómo lo intenta conseguir. El trabajo actoral es también reflejado en sus movimientos, sencillos pero muy metódicos.
Pesce logra crear una atmósfera tétrica y angustiante, sin mayor adorno o sin recurrir a recursos engañosos. A recalcar también los efectos sonoros, muy básicos pero que transmiten a la perfección esa idea de sordidez pesada. Un plus, al finalizar la proyección estará la actriz Kika Magalhaes en una sesión de preguntas y respuestas. La podrán ver a las 8:45 p.m. en el Teatro 1887, a sabiendas de que no pueden hacer meiosis, elijan alguno de los dos filmes.

Docente por vocación, cinéfilo empedernido.